Descripción
Bailando frenético entre ladrones rengos, policías malandros y canguros consumidores de opio que resultan golpeados y golpeadores, sale triunfante este discurso novelesco que llega para dejarnos fuera de lugar y para hacernos saber que este mundo desgarrado tiene una voz nueva que lo enuncia brillando, como el arito del Erik.
Comentarios